Esta es una afección cutánea más común de lo que crees y se manifiesta a través de enrojecimientos de la piel, o, vasos sanguíneos visibles en el rostro. También, puede producir pequeñas protuberancias rojas llenas de pus, las cuales suelen confundirse con el acné, pero, NO son lo mismo.

Esta es una afección que puede, lamentablemente, padecer cualquiera, solo que es un poco más común en las mujeres de edad avanzada y de tez clara.

Aunque no lo creas, no existe una cura para esto (al menos aún no) pero, existen diversos métodos y tratamientos para controlarla y mantener a raya los brotes de ella.

Síntomas

– Generalmente conlleva un enrojecimiento en la parte central de la cara, es decir, nariz y mejillas.

– Como te comentamos al principio del artículo, la rosácea viene acompañada de protuberancias enrojecidas con pus, que no deben confundirse con brotes de acné.

– La rosácea cutánea puede desencadenar rosácea ocular, la cual puede manifestarse por resequedad en los ojos, irritación en hinchazón.

– Esta afección puede generar rinofima (ya te hablaremos de eso en otro artículo) que no es más que el ensanchamiento y enrojecimiento de la nariz.

Causas

Pese a que se desconozca la verdadera causa de la rosácea, se ha concluido que, diversos factores hereditarios y ambientales pueden dar origen a ella y no la mala higiene, como se puede presumir.

Por otro lado, lo que si podemos identificar son las causas de brotes de rosácea (el pináculo de esta afección) y son los siguientes:

– Bebidas calientes

– Consumo de bebidas alcohólicas

– Temperaturas extremas

– La luz del sol

– Medicamentos que dilatan los vasos sanguíneos

– Productos cosméticos

Complicaciones

Con el tiempo, las glándulas sebáceas de la nariz y mejillas pueden sufrir un cambio, el cual genera una acumulación de tejido en la nariz, que se conoce como rinofima. Esta complicación es mucho más común en los hombres y se desarrolla lentamente en un periodo de años, por lo que puede ser fácilmente identificada en adultos mayores de la tercera edad.