La sudoración excesiva es un mal que aqueja al 3% de la población mundial. Las personas que lo sufren suelen manifestar síntomas de sudoración profusa en axilas, manos, pies y otras áreas del cuerpo, usualmente exacerbadas en situaciones cotidianas como hablar en público, en situaciones de estrés o en ambientes de calor. Esta puede estar acompañada de mal olor, llamado Bromhidrosis.
Esta patología es conocida como Hiperhidrosis, y en algunas personas que la padecen puede llegar a producir ansiedad social y vergüenza. Afortunadamente, puedes tratarla con nosotros a través de un procedimiento ambulatorio que tan solo dura 15 minutos, no requiere anestesia y sus efectos terapéuticos pueden apreciarse en un período de 5 a 7 días, mejorando la calidad de vida del paciente.
Para conseguir este resultado, utilizamos Toxina Botulínica en la o las zonas a tratar (los más comunes son en axilas, plantas y palmas de las manos). Esta Toxina Botulínica bloquea selectivamente las glándulas sudoríparas, provocando que disminuya la liberación de sudor en las zonas donde fue aplicada por un período de entre 4 y 6 meses, puede ser aplicada en cualquier parte del cuerpo y es segura de aplicar desde edades más tempranas. Después de la aplicación pueden quedar algunos moretones los cuales son temporales y reversibles.
Mujeres embarazadas, en período de lactancia o personas que padecen trastornos neuromusculares paralizantes no pueden realizarse este tratamiento. Personas que consumen antibióticos deben consultar primero a su especialista.